El
concepto de origen adopta en la obra de Valente varios aspectos, aunque podríamos
destacar, siguiendo lo expresando por David Conte Imbert, que “la figuración de
mayor alcance lo sueña como una palabra primordial, o matriz, que se situaría
en el vacío germinal de todo el abanico lingüístico”. En este mismo estudio,
sostiene Conte que la palabra poética de Valente “actúa como una fuerza innominada en la realidad misma de las
figuraciones lingüísticas”. Pero, por otro lado, “esta palabra es puro vacío
germinal que ha de ser circunscrito como tal: el lenguaje reconoce en este
vacío lo innominable que no llega a ser
siquiera palabra”. Se obtienen, en consecuencia, dos formas de acercarse a la
palabra de Valente. La primera es aquella que “piensa la realidad innominada de
una palabra primordial” y, así, “recurre a todo el legado de la mística y al topos de lo inefable o del lenguaje
insuficiente”[1].
Mientras “la segunda postura recurre, por el contrario, a una figuración de lo
originario que se desarrolla en torno al puro vacío germinal”. Es decir, “lo
que nos propone no es una relación entre palabra y silencio, sino la
transmutación de la opacidad lingüística en concreción material”[2].
También
es revelador sobre la problemática del origen en Valente el artículo de José
Manuel Cuesta Abad, titulado “La enajenación de la palabra”[3].
Para Cuesta Abad, “el lenguaje poético genera lo esencial y sintetiza con su
poderosa, paradójica multiformidad la tenaz dispersión de lo que llamamos Ser”.
Desde esta perspectiva, “la poesía de J. A. Valente representa, (…), una
interesante penetración en los contenidos enigmáticos de la palabra creativa,
un intento de sondear el fondo mítico del lenguaje poético que revela
progresivamente la persistencia de ciertas transformaciones que han destruido o
subvertido la simbología tradicional de la imaginación estética.” (Abad, 1995:
50-51).
[1] Conte Imbert, D.
(2007), José Ángel Valente y Martin
Heidegger, desde las divergencias entre poesía y filosofía, en Referentes europeos en la obra de Valente, Publicaciones
de la Cátedra José Ángel Valente de Poesía y Estética, IV, USC, Santiago de
Compostela, p. 99.
[2]
Íbid. p. 102
[3] José Manuel
Cuesta Abad, La enajenación por la
palabra (Reflexiones sobre el lenguaje poético en Valente), en El silencio y la escucha, edición Teresa
Hernández Fernández, Cátedra, Madrid, 1995, pp- 49-77.
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